Séptimo recital

Jueves 27 de agosto, 22.00 horas
séptimo recital del ciclo
El Ovillo de Ariadna
a cargo de
JOSÉ CEREIJO
y MARTA PONTIGOSO


Winter Stories, de Paolo Ventura

Café Hernán Cortés
Calle Hernán Cortés, 8
Metro Tribunal
Entrada Libre

José Cereijo

José Cereijo nació en Redondela (Pontevedra), en 1957. Desde 1968 vive en Madrid. Ha publicado cuatro libros de poemas (Límites, 1994; Las trampas del tiempo, 1999; La amistad silenciosa de la luna, 2003, y Música para sueños, 2007, estos dos últimos con la editorial Pre-Textos), y uno de relatos breves (Apariencias, 2005). Publica asimismo reseñas de libros, y artículos de tema literario. Prepara actualmente una antología de Leopoldo Panero (1909-1962), con ocasión de su centenario.

Marta Pontigoso

Marta Pontigoso nació en Valladolid en 1972. Se desplazó a Madrid para estudiar, donde continuó residiendo y ejerciendo profesionalmente como arquitecto de interiores. Formó parte del Taller de Poesía de María Chévez , y actualmente del Taller de Fuentetaja que imparte Jesús Urceloy. Combina discreta, con la escritura , los acordes de una guitarra , y en ocasiones se deja llamar canta-autora . Ha participado en diversos encuentros poéticos y tertulias literarias. Con numerosos trabajos escritos, está preparando su primer poemario.

Poemas de Marta Pontigoso y José Cereijo

Marta Pontigoso durante el recital

PRISA

La correa

tensa el cuello

de un perro muerto

sin ahogar el paseo

del amo...

Describe sinuosos

recorridos

sobre los adoquines

entre excrementos

polvo

y hojas secas

y sonríe ausente

el aire

revoloteando sin gracia

superficiales tipismos de invierno

y textos de periódico.

Marta Pontigoso

José Cereijo durante el recital

ADOLESCENCIA

Ardes en una llama

tan hermosa y secreta que, quizá sin saberlo,

tienes miedo de que, cuando la entregues,

te la cambie la vida, y no la reconozcas.

Pero así debe ser, es mi consejo. Espera.

Mientras puedas aún, disfrútala en silencio.

Podrás quizá tener, más adelante,

cuerpos, almas, saberes que llenen una vida

(perfecta recompensa, no indigna de los dioses):

esa pureza y ese fuego, nunca.

José Cereijo